Es una realidad. En las escuelas españolas se maltrata al que es diferente. Chicos y chicas sufren un verdadero infierno por defender la libre elección de su identidad sexual. El chico que se mueve de manera distinta, la chica que se aleja del canon estándar de femeneidad, el que se enamora de la persona equivocada, etc. es acosado y maltratado cruelmente.
El acoso escolar homofóbico genera sentimientos de impotencia, de rabia y de desesperanza; sentimientos que llevan a muchos de estos chicos y chicas a bajar su rendimiento escolar, incluso abandonar sus estudios comprometiendo así su futuro. O peor aún, pensar, idear, planificar y en muchos casos llevar a cabo el suicidio. No hay estudios concluyentes, pero algunas investigaciones muestran indicios de que este tipo de acoso escolar podría ser una de las principales causas de suicidio de los jóvenes españoles.
Teniendo en cuenta la gravedad que reviste el asunto, deberíamos hacer algo en vez de ampararnos en el manido comentario: "los niños son crueles por naturaleza". Tal vez preguntarnos si los niños aprenden a ser crueles y a maltratar a los demás por imitación, si somos nosotros los adultos los que influimos en ellos negativamente, o por el contrario no influimos en ellos positivamente por dejadez o simple apatía.
Y por supuesto,¿para cuándo un intento por parte de la administración de solucionar este problema?, ¿va a ser posible desarrollar un plan para la prevención del suicidio a causa del acoso escolar homofóbico?, ¿cuándo se va a poner en práctica una formación específica del profesorado?,
No hay comentarios:
Publicar un comentario